Ayer, los más de 300 mil ciudadanos neuquinos acudieron a las 1.342 mesas ubicadas en 262 escuelas para emitir su voto, en una nueva fecha del calendario electoral 2011 que permitió definir la puja por la gobernación; 35 diputaciones provinciales; 17 intendencias; y 129 concejales.
El resultado esté nuevo round electoral, previsible, cristalizó la reelección del actual gobernador del Movimiento Popular Neuquino, Jorge Sapag, quien obtuvo el 47,6 % de los votos frente a un 33,3 % del candidato de la Concertación, Martín Farizano; y a un pobrísimo 6 % conseguido por Jorge Villar quien encabezó la formula de la Coalición Cívica.
Ahora bien, podemos obtener como conclusión primaria y casi obvia, la innegable fortaleza en la legitimidad construida por Sapag y el MPN basándonos en este nuevo voto de confianza logrado.
Pero a ella, debemos sumarle una segunda conclusión que se condice con los sondeos de opinión que le dan a la Compañera Presidenta Cristina Fernández una intensión de votos superior al 60 % en Neuquén, y que vienen a corroborar que la victoria de ayer, ha sido otro espaldarazo al Gobierno Popular.
Porque si sumamos los porcentajes de los dos espacios que más votos obtuvieron –recuérdese que ambos apoyan este proyecto de país-, obtenemos un 80,9 %.
Desde luego que esa cifra puede no trasladarse así a la elección general y tener una dispersión de 10 o 15 puntos porcentuales, pero aún con ese derrotero, en Neuquén la victoria se encamina a ser aplastante.
Máxime cuando en sus primeras declaraciones como gobernador reelecto, Jorge Sapag, expresó que desde mañana y si ella así lo define, trabajará para que “la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner sea reelecta”.
Para finalizar, creo no equivocarme si afirmo que Neuquén está con el Proyecto Nacional y Popular.
Compañero Ikal Samoa
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