La sutil forma de exigir mano dura también es pro.

Magnificado por el Monopolio, como se observa aca y suele hacer con los temas que le interesa instalar en la agenda pública, la jornada de protestas de distintos grupos opositores que bloquearon los ingresos a la Capital Federal no estuvo centrada en la discusión política, ni siquiera en el contenido injustificado de las manifestaciones.
Lejos de ello y desviando el foco de atención, los grandes medios en una nueva muestra de solicitud de expeditiva mano dura salieron a graficar el supuesto caos vivido por los porteños, como si algunos accesos cortados fueran el mayor mal de la nación.
En clara connivencia con este discurso que intenta simplificar un problema complejo Rodríguez Larreta - Jefe de Gabinete de el niño “Yo no fui” Mauri- en declaraciones reproducidas hasta el hartazgo culpo al Gobierno Popular por los bloqueos y dejo entrever su solución al problema pidiendo que se respete “sobre todo” el derecho a la libre circulación.
No casualmente el monopolio y sus felpudos parlantes analizan la problemática de la protesta social desde el punto de vista del supuesto caos, es lógico que apuntan a un sector bien definido de la sociedad el cual es muy permeable al discurso de la derecha, su mano dura y sus mares de racismo.
Rodríguez Larreta en otro intento de cerrar la discusión con palazos y balas de goma para las organizaciones sociales deja bien claro en su discurso que la protesta social esta supeditada a la libre circulación, lo que es similar a decir que es mas importante andar en auto que reclamar por un trabajo, salud, educación o comida.
Esta visión típica de el medio pelo de la sociedad Argentina parafraseando al gran Arturo Jauretche, visión nostálgica de los momentos represivos la cual busca encontrar la forma mas sutil, diplomática y porque no mentirosa de decir lo que no se animan a decir con todas las letras se sostiene y se reproduce no solo por personajes nefastos como los que integran el Gobierno de Mauricio, sino también por formas mediatizadas cristalizadas en una simplificación adecuada a la perpetuación de un modelo de sociedad que abandone a los desprotegidos y abrace la cruzada de la “opción por los ricos”.

Compañero Ikal Samoa