Hoy se cumple un nuevo aniversario de aquel doloroso 20 de diciembre de 2001.
Un día en el cual el modelo neoliberal estalló por su inhumana capacidad para excluir a millones de argentinos y sumirlos en la miseria.
Un día en que las clases medias se acercaron – aún con intereses mezquinos- a los pobres para llevar adelante la protesta, la resistencia al estado de sitio impuesto por el gobierno neoliberal; represor y asesino de Fernando De la Rúa.
Un día en el que más allá de las incitaciones que pudieran haber existido desde mas de un sector político hacia los saqueos y la protesta virulenta, supimos ver la dignidad de los humildes haciendo sentir su voz ante los atropellos de un establishment financiero y mediático – aunque en ese momento no se lo divisara así- que mediante sus sirvientes gobiernos supo destruir al país desde 1976 en continuado.
Un día en el que el pueblo dijo basta con un costosísimo saldo de 33 muertos y decenas de heridos que nos legó la brutal represión del último gobierno radical a la fecha.
Hoy, nueve años después, en un país en pleno proceso de construcción de un Proyecto Nacional y Popular con desarrollo; inclusión; solidaridad; y esperanza, es una obligación ciudadana exigirle al Poder Judicial que tanto nos suele avergonzar últimamente arbitre los mecanismos necesarios para conocer toda la verdad.
Hoy debemos volver a reclamarle justicia y castigo a los culpables de aquella masacre porque tras nueve años, tenemos al ex- presidente sobreseído y al resto imputados, es decir ex funcionarios civiles y policiales, en libertad a la espera de un juicio oral que supuestamente iniciaría a fines de 2011.
Hoy no olvidamos y volvemos a levantar las banderas de la memoria, la verdad y la justicia.
Un día en el cual el modelo neoliberal estalló por su inhumana capacidad para excluir a millones de argentinos y sumirlos en la miseria.
Un día en que las clases medias se acercaron – aún con intereses mezquinos- a los pobres para llevar adelante la protesta, la resistencia al estado de sitio impuesto por el gobierno neoliberal; represor y asesino de Fernando De la Rúa.
Un día en el que más allá de las incitaciones que pudieran haber existido desde mas de un sector político hacia los saqueos y la protesta virulenta, supimos ver la dignidad de los humildes haciendo sentir su voz ante los atropellos de un establishment financiero y mediático – aunque en ese momento no se lo divisara así- que mediante sus sirvientes gobiernos supo destruir al país desde 1976 en continuado.
Un día en el que el pueblo dijo basta con un costosísimo saldo de 33 muertos y decenas de heridos que nos legó la brutal represión del último gobierno radical a la fecha.
Hoy, nueve años después, en un país en pleno proceso de construcción de un Proyecto Nacional y Popular con desarrollo; inclusión; solidaridad; y esperanza, es una obligación ciudadana exigirle al Poder Judicial que tanto nos suele avergonzar últimamente arbitre los mecanismos necesarios para conocer toda la verdad.
Hoy debemos volver a reclamarle justicia y castigo a los culpables de aquella masacre porque tras nueve años, tenemos al ex- presidente sobreseído y al resto imputados, es decir ex funcionarios civiles y policiales, en libertad a la espera de un juicio oral que supuestamente iniciaría a fines de 2011.
Hoy no olvidamos y volvemos a levantar las banderas de la memoria, la verdad y la justicia.
Compañero Ikal Samoa
No hay comentarios.:
Publicar un comentario