Mi General cuanto vales.

A sabiendas de que a mis palabras le faltaran conceptos que quedaran en el tintero, no podía dejar pasar el día de la fecha sin hacer mención al más grande estadista y conductor de Argentina.

Es que hoy, se cumple el trigésimo séptimo aniversario del fallecimiento de quien fuera capaz de reconstruir y liderar al Movimiento Nacional y Popular que supo forjarse a lo largo de la historia en estás maravillosas tierras.

Juan Domingo Perón, tuvo la inteligencia; la sensibilidad; y la sensatez, para pensar y organizar un movimiento que convocase y contuviese a los pobres y los desclasados; a los trabajadores, ignorados y humillados durante décadas en un país cuya oligarquía los usaba para configurar una sociedad injusta y soberbia.

Él supo amarlos y comprometerlos a transformar esa realidad que los explotaba, y por ello lo ungieron su referente; su voz; su máximo líder político.

Con su voluntad, su fuerza y su capacidad inigualable para analizar la realidad; repensarla; y llevar adelante un proceso popular que cambio la estructura política y social para siempre, El General, supo dar cuenta y atacar a todas y cada una de las ecuaciones irracionales naturalizadas como premisas, bajo las cuales se había venido gobernando la nación antes de su irrupción.

Supo enfrentar a la oligarquía y sus socios internacionales alejándose de las potencias imperiales y recuperando la bandera de la unidad latinoamericana, y fue construyendo en base a políticas estratégicas, un proyecto de país solidario y productivo, con salud; educación; trabajo; vivienda; y dignidad para todos, pero en especial para los pobres.

Supo forjar la Argentina del desarrollo con un Estado pujante y conciente de sus obligaciones; de su razón de ser, supo hacer realidad el Proyecto Nacional y Popular.

Un proyecto con tres fundamentos irrenunciables a la hora de actuar: Soberanía Política, Independencia Económica y Justicia Social.

Un proyecto que venimos recuperando en el hacer del día a día desde mayo de 2003, cuando El Compañero Néstor Kirchner asumió la presidencia de la nación.

Perón supo ser nuestro conductor y dio la vida por el Pueblo, por nuestro Pueblo.

También fue poeta; escritor; e historiador.

Pero quizás, lo que más nos reconforta, aún a quienes que no pudimos serle contemporáneos, es que fue y sigue siendo nuestro maestro.

Compañero Ikal Samoa