Vidal y el cinismo pro.

Tal parece que el cinismo pro no tiene límites, y hoy tuvimos un nuevo y palpable ejemplo de ello en la sumisa y cómplice entrevista que publica el diario La Nación a la candidata a vicejefe porteña del macrismo, María Eugenia Vidal.

Entre barbaridades; y frases que escapan a la realidad, Vidal, al ser consultada sobre las tres políticas más importantes que desarrollaron en su nefasta gestión, afirmó que esas fueron: “La baja de la mortalidad infantil. Haber resuelto en gran parte el problema de infraestructura escolar y estar sumando hoy calidad, gracias al acceso a ingles y las computadoras desde primer grado, y el Metrobus como símbolo de un gobierno que busca innovar todo el tiempo”.

Ahora bien, uno se ve en la obligación de decir que la actual ministra de Desarrollo Social de Macri, indudablemente no tiene vergüenza para mencionar la baja de la mortalidad infantil como un logro.

Las propias estadísticas de la CABA indicaron que en 2009 y en coincidencia con el tiempo prudente transcurrido luego del cual un gobierno empezaría a observar los frutos de sus políticas, la gestión pro consiguió, como primer funesto resultado, aumento considerablemente la mortalidad infantil llevando al distrito a tener la tasa más alta del país.

Esto, con el agravante de estar gobernando la jurisdicción que más recauda y más recursos tiene.

Como obtuvieron ese resultado, simple, llevando adelante su línea política que subejecuta partidas en Salud y Desarrollo Social; que abandona a los sectores sociales de menores recursos a las inclemencias del mercado - más si consideramos que ese año urgía con mayor ímpetu la presencia del Estado con políticas de contención en lo social y económico; con políticas anticiclicas ante una crisis mundial en expansión- y los antojos de alguna ONG.

Como era de esperar, la mortalidad infantil disminuyó en 2010, pero no por las políticas macristas que continuaron siendo idénticas, sino por las políticas económicas nacionales que se habían tomado, y que permitieron al país retomar los niveles de crecimiento y desarrollo económicos anteriores a la crisis mundial, los cuales lógicamente terminan influyendo en el bienestar y la salud de la población en todo el país.

Tampoco parece tener vergüenza la candidata al hablar de la supuesta resolución de los problemas en materia infraestructura escolar, cuando bien sabe que lo único que ha hecho el pro en el 90 % de las escuelas ha sido colocar los andamios y los carteles que simulan las obras no ejecutadas.

6 % del presupuesto, es la cifra promedio que ejecuto la administración Macri a lo largo de su gestión en esta materia.

Desde ya, bastante menos de lo que ejecuto para comprar las computadoras más caras del mundo al grupo Clarín en el marco de su programa de entrega de netbooks a alumnos de escuelas primarias.

Afortunadamente, el negociado entre Clarín y Macri ya esta en manos del Poder Judicial, el cual esperemos actúe conforme a derecho.

Ante la gravedad de lo expuesto, hablar del Metrobus, el otro fantástico logro según Vidal, seguramente es un tema menor.

En orden a ello, sólo diré que no puede ser innovador un sistema que resulta innecesario dada la fluidez del transito en la Avenida Juan B. Justo, y aún si no fuera fluido, hubiera sido más lógico aplicar la modalidad de carriles exclusivos, y no llenar de concreto la calle quitando carriles existentes.

A esta altura de los acontecimientos, uno no puede expresar que resultan sorprendentes los dichos de la candidata a vicejefe, pues está curado de espanto.

Lo que si sorprende, es la impunidad con la cual manifiesta su cinismo y su total desvergüenza.

Compañero Ikal Samoa