Catamarca y el elefante.

Parecía una jugada perfectamente armada pronta para su ejecución, por lo menos así se pensaba en las filas radicales.
No podía haber otro resultado que no fuera una nueva reelección del actual – porque increíblemente el traspaso de mando es en Diciembre- gobernador Brizuela del Moral, al menos en el pan- radicalismo eso creían.
Por ello decidieron adelantar la elección para ser la primera del 2011.
La idea era la siguiente, teniendo en cuenta que Brizuela del Moral gobierna Catamarca hace 20 años y que las encuestas dos meses atrás le daban una diferencia de 20 puntos, era imposible, sentían, no ganar esa elección.
Máxime cuando al repasar el historial provincial nos encontramos con que nunca un oficialismo perdió la gobernación por la vía electoral.
Era jugar a ganador y montarse al caballo de la victoria pensaron todos los dirigentes nacionales, y así fue como empezaron a arribar desde el mediodía de ayer a San Fernando del Valle.
Cobos a la cabeza, pues claro, es sabido que el próximamente ex gobernador siempre fue cobista, de hecho en la elección de 2007 – antes de la traición 125 mediante- fue el compañero de formula de la Compañera Lucía Corpacci.
Pero a él le siguieron Sanz; Ángel Rozas; Gerardo Morales; y Gil Lavedra, todos ansiosos por salir en la foto de una victoria esperada, pensando en ello como el punto de partida para debilitar al Frente para la Victoria de cara a Octubre.
El razonamiento era sencillo, intentar instalar que Catamarca era el inicio de una seri de derrotas electorales para el Proyecto Nacional y Popular que apuntalarían al pan- radicalismo de cara a la elección general.
Es una pena – y estoy siendo sarcástico- que se les haya escapado un pequeño gran detalle, vieron una hormiga donde hay un elefante.
Es que se les escapo pensar si el pueblo podía realmente acompañarlos en contra del Proyecto Nacional y Popular, y digo esto porque la Compañera electa Gobernadora Lucía Corpacci planteó y logró instalar una campaña entorno a la idea de que Catamarca debía sumarse al Proyecto Nacional.
A ésta altura parece indudable reflexionar que la estrategia electoral tuvo un éxito rotundo.
Éxito que Lucía supo armar en estos tres meses de campaña entendiendo que su mejor arma era la de mostrar su espacio de pertenencia y el proyecto participativo e inclusivo que venimos construyendo desde el mismo.
Éxito que dio por tierra aquella supuesta invensibilidad del Frente Cívico y Social con el que el radicalismo mordió el polvo de la derrota, y que paralelamente abre un escenario con posibles consecuencias impensadas para todos los analistas opositores como ser la del efecto contagio que pueda generarse en próximas contiendas electorales, o la de la probada capacidad que tiene Cristina para trasladar su imagen positiva a los candidatos jurisdiccionales que representan al Proyecto.
He allí lo más terrible de la derrota consumada ayer para la oposición, que arriesgó convencida de que jugaba a ganador y fracaso notablemente.
Nunca vieron con claridad esas posibles consecuencias; nunca vieron al elefante, y por ello ahora los invade la desazón – demás NO está decir que todos los radicales llegados a Catamarca huyeron como ratas por la puerta de atrás de la Casa de Gobierno ante el resultado-.
Nunca supieron ni quisieron entender la voluntad de un Pueblo Catamarqueño que nos llena de orgullo por su apuesta lógica; sensata; y racional hacia un proyecto que tiene en el horizonte una Patria para todos.
El resultado: Lucía Corpacci (FpV) 48,3 %, Brizuela del Moral (FCyS) 44,2 %.

Compañero Ikal Samoa