Nuevo paro docente en Buenos Aires.

Finalizaron las vacaciones de invierno en varias provincias del país entre las que se cuenta Buenos Aires, sin embargo, allí no hubo vuelta al ciclo lectivo porque el frente gremial docente, integrado por la Federación de Educadores Bonaerenses; Suteba; y Amet, decidió llevar adelante un paro por 48 horas.

El motivo que esgrimen para esta nueva medida de fuerza, según palabras del propio Roberto Baradell en declaraciones radiales de hoy, es que la Provincia inclumplió el acuerdo paritario firmado en marzo “en materia de infraestructura, comedores escolares, normalización de la obra social”, y también  que como la inflación ya “se llevó la primera cuota del aumento otorgado” se reclama “que se active la cláusula de monitoreo para analizar concretamente cómo se dio la evolución del aumento del costo de vida”.

La respuesta del gobierno provincial el día de hoy ha sido la convocatoria a los gremios por parte de Alberto Pérez, Jefe de Gabinete sciolista, a una reunión para el miércoles aduciendo, como era de esperar, que no iban a negociar bajo la presión de una medida de fuerza.

Independientemente de cuán cierto es lo que denuncian los gremios respecto del incumplimiento del acuerdo en materia de infraestructura; comedores escolares; y normalización de la obra social, el punto que parece, una vez más motorizar la protesta docente, es el que se expresa en cuanto a lo relativo al costo de vida y la cláusula de monitoreo – todos eufemismos que suplantan el pedido de un aumento de los sueldos-.

Al respecto, cabe considerar que ha habido una pronunciada desaceleración del costo de vida en los meses posteriores al acuerdo (abril, mayo, junio y julio) por lo que uno podría poner en duda, desde la legitimidad de este reclamo; el de fondo, hasta la capacidad de negociación del frente gremial docente – entiéndase: Sí a los cuatro meses estás pidiendo una mejora salarial cuando el acuerdo fue pautado por un año, la pregunta es: ¿Qué pautaron en esas larguísimas semanas de marzo?-.

Como sea, hasta el miércoles, día en el cual Pérez se encuentre con los referentes gremiales – Scioli define que sea él y no la Directora General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, Nora De Lucía, en un claro gesto de acercamiento-, no habrá mayores novedades sobre un conflicto que se reabre.