Como Néstor lo hubiera querido.

El sábado se cumplió el segundo aniversario del paso a la inmortalidad del Compañero Néstor Kirchner, y de todos los rincones de la patria brotaron homenajes de todo tipo y color.

Con esa mezcla de dolor por la perdida, que a pesar de lo vertiginoso de la vida política argentina sigue siendo reciente, y de fortaleza por un legado vivo que se palpa en cada acción entorno a nuestro proyecto colectivo, miles y miles de compatriotas compartimos una jornada militante como a él le hubiera gustado.

Una jornada militante en las calles, con la participación de todas las generaciones, que puso en prácticas concretas aquello que tantas veces denominamos como su legado.

Porque el legado de Néstor es justamente el de la militancia y la construcción del sueño colectivo; el de aportar desde nuestros territorios específicos para este proceso de transformación que viven el país y la región.

De allí, el acierto, que más que acierto fue una necesidad surgida desde cada espacio, de interpretar que a Néstor había que homenajearlo militando en cada barrio; en cada localidad del país.

Y de allí también, la convicción del sabernos responsables, en tanto militantes, de profundizar, junto a la Compañera Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, el Proyecto Nacional y Popular.