Estar afuera; extirpados del mundo, según el relato de los multimedios cancerigenos que sufrimos en el país, ha sido en los últimos años, una de las mayores mentiras que han pretendido imponer.
“Argentina esta aislada” hemos leído y escuchado cantidades de veces, como definición supuestamente certera de nuestra política en materia de relaciones internacionales.
Lógicamente, en este como en tantos otros casos de embustería propia de la prensa que domina el mercado de la palabra en el país, la conclusión no tiene fundamentos que la sustenten.
Lejos de ello, Argentina del 2003 a la fecha, se ha transformado en un actor central en la región a partir de su vital aporte en la construcción de la Patria Grande, y de igual forma, ha venido teniendo rol protagónico en foros internacionales.
Ha fortalecido lazos con países emergentes de otras regiones del mundo y entre ellos y con preponderancia, lo ha hecho con la República Popular de China.
Entonces, aunque la negación interesada sea noticia de aquellos que patalean porque el país ya no se arrodilla ante las potencias del actual primer mundo en decadencia, no resulta sorprendente la visita del primer ministro chino Wen Jibao, quien afirmó que su presencia en el país tiene como objetivo “fortalecer la comunicación y el desarrollo común de Argentina y China”.
Resulta menos sorprendente, si recordamos que en 2004 y mientras el Compañero Néstor Kirchner era Presidente, había sido Hu Jintao, antecesor de Wen Jibao, quien había venido al país para iniciar lo que ayer, tanto el premier chino como la Compañera Presidenta Cristina Fernández, definieron como “una alianza estratégica entre los dos países”.
La contundencia de los hechos, vive haciendo pedazos esa falacia sobre el aislamiento del país, y esta ocasión no es precisamente una excepción.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario