Milani.

Las dudas sobre el pasado de César Milani, general propuesto para encabezar la cúpula de las FFAA, van en aumento, y al testimonio ante el Poder Judicial de Ramón Olivera, ex preso político, ahora se suma la impugnación del CELS a su nombramiento.

El organismo, que hasta ayer decía no encontrar ninguna prueba que diera cuenta de la participación de Milani en la dictadura cívico- militar, hoy se opuso a su ascenso.

La impugnación fue determinante para que se pospusiera el debate sobre su pliego en la Cámara de Senadores, pues fortalece la denuncia sobre la participación de este general en el genocidio, y más allá de la utilización del tema por parte de los medios opositores cómplices del genocidio y de aquellos opositores oportunistas que cuando gobernaban levantaban las banderas de la falsa reconciliación nacional garantista de la impunidad para los culpables del terrorismo de Estado – civiles y militares-, la sospecha pública con indicios amerita profundizar la investigación.

En datos concretos, Milani nació en 1954 con lo que, en el año del golpe, tenía 22 años; una edad muy corta para acceder a lugares de decisión en las FFAA – corporación gerontocrática.

Más allá de ello, a su corta edad bien podía ser parte de los crímenes o asistir a sus superiores, algo de lo que se le acusa específicamente respecto a su participación en el Operativo Independencia del año 1975, previo al golpe de Estado.

Dicho esto y conociendo los 10 años de historia bregando por los Derechos Humanos que tiene nuestro gobierno - el que anuló las leyes de impunidad y propició, abriendo los archivos y poniendo toda la información disponible en manos de las organizaciones populares y del Poder Judicial,  los avances en todas las causas por delitos de lesa humanidad-, resulta fundamental tomarse el tiempo necesario para establecer si hubo o no participación de Milani en el genocidio, y obrar en consecuencia.