Más jubilados y más beneficios para ellos.

Ayer al mediodía en un acto transmitido por cadena nacional, la Presidenta, Cristina Fernández, realizó tres anuncios dignos de destacar.

Por un lado y en contraposición con la charlatanería opositora que nos cuenta la supuesta carencia de inversiones, dio a conocer que la multinacional Nissan-Renault invertirán U$S 600 millones en la planta de Santa Isabel, Córdoba, para la producción de camionetas.

Una inversión que impacta de lleno en la industria automotriz aumentando la producción y generando puestos de trabajo.

Seguido a ello, expuso sobre los alcances de los nuevos beneficios para los jubilados por medo de la tarjeta argenta - un aumento de 20.000 a 30.000 pesos en los préstamos inmediatos pudiendo retirar la mitad por cajero automático, y los descuentos de hasta un 35% en pasajes de trenes de media y larga distancia-, que representan una posibilidad sin precedentes para que nuestros abuelos accedan a viajes y bienes durables.

El tercer anuncio, fue el de la presentación de la jubilación número 450.000 alcanzada por la segunda moratoria previsional que cuando culmine, permitirá que la cobertura llegue al 97% de los argentinos en condiciones de jubilarse; una cifra que significa una ampliación histórica del sistema que hoy permite que millones de argentinos que trabajaron toda su vida negreados puedan acceder a una jubilación digna.

Llegar a ese 97%, da cuenta de la vocación por ampliar derechos en un país que previo a este proceso político, tenía un sistema previsional privatizado y excluyente, en el cual se utilizaba los fondos de los aportantes para el negocio de los dueños de las AFJP.

Argentina hoy, tras la estatización de los fondos previsionales y la gestión de una ANSES renovada y pujante, está arribando a “lo que se conoce cobertura universal”, palabras propias de la Presidenta, siendo el único país de la región en esta condición, y ello, cabe recordar, con dos aumentos por año en las jubilaciones tal cual marca la ley vigente.