El Sarmiento en manos del Estado.

Ayer por la tarde, el Ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, anunció que a partir de hoy, el FFCC Sarmiento pasará a ser operado completamente por el Estado.

La medida, que representa un nuevo avance en la reconstrucción del sistema ferroviario, implica desde la fecha, que el ramal, estará bajo el control de las estatales, Sociedad Operadora Ferroviaria Sociedad del Estado (SOFSE) y Administración de Infraestructuras Ferroviarias Sociedad del Estado (ADIFSE).

De esta forma, serán estas dos empresas estatales, las encargadas de gestionar todo lo referido a la operación del servicio diario, incluyendo lo requerido en materia de infraestructura.

Randazzo también anunció que se agregarán nuevos protocolos de seguridad en las formaciones - los jefes de tren deberán estar en la cabina acompañando al conductor en la llegada a las cabeceras; la velocidad deberá ser reducida a 5 km/h en el ingreso a estas últimas; y la formación deberá detener su marcha 20 metros antes-, y que se profundizarán los controles médicos a los conductores de todos los ramales – los mismos están a cargo del Instituto Nacional de Medicina Aeronáutica y Espacial (INMAE)-.

Párrafo aparte merece la convocatoria realizada por el Ministro hoy en declaraciones radiales, buscando el necesario compromiso de los gremios y todos los trabajadores ferroviarios: “Los gremios tiene un oportunidad histórica, esta conquista que es la recuperación de los ferrocarriles para el Estado no debe ser un eslogan sino que tiene redundar en mejor servicio y no cometer errores del pasado”.

En el Sarmiento puntualmente, se ha puesto en evidencia la total falta de compromiso de las concesionarias respecto del cumplimiento de sus obligaciones, y en este sentido, si algo nos ha dejado la catastrófica lección de la privatización de los FFCC, es que este servicio no puede ser delegado por parte del Estado.

En el camino de la recuperación y puesta en valor de los FFCC, se ha venido trabajando con definiciones políticas en materia de inversiones tan notables como urgentes, pero también con la reorganización que hace a cada aspecto necesario para el funcionamiento diario. 

Desde luego, la recuperación del sistema ferroviario no es algo que pueda realizarse de la noche a la mañana, y los cambios se empezarán a notar con el tiempo – a partir de hoy, ya funcionan algunas formaciones 0 km adquiridas en China en el ramal San Martín, por poner un ejemplo concreto-.