En la tarde de ayer, entre precandidatos presidenciales y
competidores suyos en la interna del Frente para la Victoria para la
gobernación de la Provincia de Buenos Aires, el Jefe de Gabinete, Aníbal
Fernández, lanzó su precandidatura en búsqueda de suceder a Daniel Scioli en el
sillón de Dardo Rocha.
Fue en un acto que realizó en el Teatro NH Tango, en el que
fue el único orador, y su discurso hizo referencias conciliadoras claras hacia sus
competidores y la gestión actual de la Provincia de Buenos Aires.
Construir sobre lo ya realizado a nivel distrital y nacional,
para seguir avanzando en un país inclusivo y solidario, fue el mensaje
fundamental en pos de la pretensión de continuidad del proyecto político.
Aníbal se sumó así, formalmente, al lote – y usar esta
palabra ya implica casi una multitud- de candidatos del FpV que pretende
competir en la interna por el distrito electoral clave del país; lote que difícilmente
no se achique de acá a las PASO, acuerdos mediante.
Al margen de ello, lo cierto es que Aníbal desembarca en la
provincia para presentar batalla y no es un candidato menor, por su trayectoria
en el peronismo, pero también por su capacidad de gestión; su llegada a la
gente; y su visibilidad actual desde la Jefatura de gabinete de la Nación.
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