Por más trabajo registrado.

Hace un rato y en Casa de Gobierno, la Compañera Presidenta de todos los Argentinos, Cristina Fernández, encabezó un acto durante el cual entregó certificaciones del programa de créditos del Bicentenario por $ 581 millones, destinados a financiar casi 50 proyectos que generarán 2150 empleos.

En ese marco, la Jefa de Estado señaló que “la clave está en desarrollar cada vez más la inversión y ampliar la producción para que se amplíe el mercado laboral” y advirtió que hay que comenzar “a discutir cómo se distribuye el trabajo en la Argentina y que haya distribución del trabajo, no solo vía aumento de la productividad y se tengan los mismos empleados y no ingresen nuevos o queden en el círculo negro”.

“Nos hubiera gustado tener un crecimiento de trabajo registrado” al ritmo en que han aumentado las ventas y los salarios porque “hay un sector que no esté registrado y no cuenta con los beneficios del trabajo en blanco”, explicó la Compañera, y agregó que debe ser una preocupación “de la dirigencia gremial, empresarial, social” porque no se trata sólo de aumentar la productividad “sino la inversión para incorporar gente y atender más y mejor al mercado interno”, todo ello “sin trasladar a los precios”.

“Estos conceptos hay que asimilarlos, ponerlos en la cabeza, son parte de la política que el Estado va a controlar” subrayo para concluir, y resultan evidentemente justas sus palabras que visualizan parte de la problemática laboral.

Cristina, lejos de dejar de lado esta problemática, sale ha marcarle la cancha a empresarios y emprendedores sobre lo que el país necesita para continuar fortaleciendo el mercado interno y afianzando el mercado laboral.

Como bien expone, urge que crezca el trabajo registrado por lo que representa en derechos adquiridos para los trabajadores, pero también por el papel que juega en el fortalecimiento del círculo virtuoso de la economía.

Compañero Ikal Samoa